¡AYER SOÑÉ QUE PODÍA, HOY PUEDO!

"La Aventura de Ser Maestro"
Como una de las actividades más nobles que la vida me dio la oportunidad de ejercer por el hecho de tener un contacto permanente con jóvenes a los que considero he podido servir de ejemplo y guía no solo en las asignaturas que me ha tocado impartir sino en algunos aspectos relacionados con sus problemas familiares, económicos y sociales.
Siempre e creído que del trabajo que hagamos con nuestros educandos en esta etapa de transición entre la adolescencia y la juventud, porque los recibimos de 15 a 16 años y se los devolvemos a la sociedad a los 18 – 19 es decir ya con la credencial para votar; dependerá en gran parte la personalidad del individuo que estamos formando, es decir si tu trabajo fue exitoso seguramente ese chico saldrá motivado para enfrentar los retos que la vida le presente, ya sea en el nivel superior o en cualquier trabajo; pero si a diferencia fue frustrante, sin compromiso, solo estaremos contribuyendo a agrandar la estadística de desocupados.
Luego entonces tenemos el firme compromiso de tratar de hacer nuestro trabajo con amor, porque como dice F. Cabral, “aquel que trabaja en lo que no ama aunque lo haga todo el día, es un desocupado”.
Les comento ahora lo que para mí es un día de clases: de acuerdo a mi programación o plan de curso hoy me toca impartir la asignatura de CTSyV con los grupos de quinto semestre, con ellos desde que les presente el programa les dije que íbamos a interactuar desarrollando actividades individuales, grupales y por equipo; hoy es jueves y me tocan sesiones de dos horas con cada grupo; aunque tenemos una sola secuencia didáctica por unidad, y la apertura fue el rescate del conocimiento previo para lo que aplique preguntas directas planteadas en un cuestionario impreso, ahora estamos en la fase de desarrollo donde parte de las actividades es la exposición de temas por equipo, antes de exponer el equipo prepara su material, pega sus hojas de rotafolio o instala el equipo audiovisual, uno de ellos presenta a los integrantes y el tema a desarrollar, cada integrante expone una parte del mismo y al final se hace una sesión de preguntas y respuestas; de acuerdo al interés del grupo o al contenido temático como facilitador realizo un resumen o comentario final relacionándolo con alguna experiencia o buscando una aplicación al momento actual. Cada equipo entrega al resto del grupo un resumen destacando las ideas principales del texto expuesto que servirá como material de lectura para el examen escrito del bimestre.
Casi todo el trabajo se centra en el aula, aunque trato de relacionarme con ellos también fuera, es decir en las aéreas recreativas, cafetería y oficina; donde ocasionalmente me abordan para plantear alguna duda o comentario.
Sigo trabajando por necesidad de sentirme útil, porque me gusta lo que hago, me hace sentir bien y lo que busco más que cumplir con el programa es despertar el interés en el alumno por el estudio, porque sea una persona valiosa que haga las cosas con pasión, que sean mejores cada día a pesar de la crisis que se vive en todos los aspectos, yo les digo que para mi todos son afortunados por el hecho de estar en una escuela, que tomen lo mejor de cada uno de sus maestros, que si tenemos errores es porque somos humanos y que a veces no nos toca juzgarlos.


“La confrontación con la docencia: Entre la docencia y mi profesión”

En el nivel bachillerato cursé la especialidad de Técnico Pecuario; y considero que ahí nació mi vocación docente ya que algunos profesores me asignaban sus grupos para realizar algunas actividades prácticas; años más tarde me dieron la oportunidad de realizar mis estudios de licenciatura en un programa de becas y fue así como en 1985 me recibí como “Ingeniero agrónomo especialista en educación agropecuaria”.
Mi primera experiencia docente la tuve en el nivel superior en el Instituto tecnológico Agropecuario Núm. 28 de Villa Ocuiltzapotlán, Centro, Tabasco; después de un semestre solicite mi reingreso al Nivel Medio Superior y fue así como me reintegre al CBTa 82 de Balancán, Tabasco; plantel donde había cursado mis estudios de bachillerato.
Las asignaturas que me asignaron en su mayoría eran de acuerdo a mi perfil profesional excepto taller de lectura, para la que me tuve que seguir preparando hasta dominarla.
De mi trabajo docente sigo pensando que es una tarea muy digna, y siento que la trato de realizar con entrega, aunque a veces me decepciona un poco la actitud de algunos de nuestros jóvenes que se vencen a las primeras de cambio o que se niegan a participar en las actividades de cada asignatura.
Trabajar en EMS tiene para mí un significado importante porque como ya lo expresé tengo la oportunidad de transmitir mis conocimientos y experiencias a alumnos en cuya mayoría me reflejo, tanto por sus orígenes, como situación económica y he tratado de verlos como mis hijos.
Mis motivos de satisfacción son varios pero especialmente a sido motivo de orgullo que los encuentre convertidos en profesionistas, o simplemente en adultos y me saluden con respeto, si es posible compartamos una taza de café y que me den las gracias por haberlos encauzado cuando lo requerían, la alegría de ellos cuando concluyen sus estudios es contagiosa porque considero que al final de nuestra trayectoria institucional hagas lo que hagas, solamente te queda la satisfacción de deber cumplido.
Las insatisfacciones son el que a veces no sea del todo comprendido, por mi afán de querer lo mejor para mis alumnos, sobre todo cuando veo a compañeros docentes que los maltratan, humillan, minimizan y reprueban por no haberse puesto a mano con la cuota; estos mercaderes de la educación lamentablemente existen y se protegen mutuamente. Es mi principal insatisfacción, a veces me frustra ver tantos alumnos reprobados cuando el NMC dice que la evaluación es un proceso continuo y ellos siguen aplicando exámenes de 10 preguntas abiertas.
Por eso fue que una ocasión me atreví a expresar públicamente en una reunión el hecho para mi inoperante de que el nuevo modelo naciera precisamente con maestros hechos a la ultranza es decir con vicios arraigados que hasta la fecha no a sido posible erradicar.